Keeping Up With The Cisneros: Otoño 2016

Confieso que esta estación ha sido muy divertida. Diferente. También confieso que ha sido mi edad favorita de Victoria (ya sé ya sé muy diferente a la entrada anterior de "Terrible Twos, so far so terrible"), pero también tiene sus ventajas. Victoria habla mucho, me dice qué tiene, qué quiere, empieza a ir al baño sola, sin mi ayuda, quiere ser independiente. Lo de dormir va mucho mejor también. Le hemos cambiado su camita por una individual y parece que le ha gustado. Ha podido quedarse ahí por varios días seguidos (claro que nunca falla la madrugada en que llega a mi cama y me asusta porque siento una mirada).

Al salir de casa es divertido también, vamos a un restaurante y se porta bien. Creo que de lo único que me puedo quejar es que el 12 de diciembre fuimos a misa de la Guadalupana y la niña no se estuvo quieta ni un segundo, aparte de que comió durante toda la misa. Me dio un poco de vergüenza porque la señora de enseguida me dijo "¿Así de activa es siempre?" jaja. Pues no grita ni llora, pero sí se tiene que estar moviendo, no puede estar sentada. Así que dije lo mismo que con el cine, "no vuelvo hasta que se comporte".

Hemos hecho varios paseos en familia también. Estuvimos en SF para el cumpleaños de Chuche. Nos paseamos en una lancha de esas de pedales. Victoria lo disfrutó tanto que llegó dormida al final del paseo.

Estuvimos en Santa Cruz para el cumpleaños de Max. Debo decir que ha sido uno de mis favoritos viajes. No tanto el paseo de tren sino el convivio que tuvimos y ver a los niños jugar en la arena fue priceless.

Este año para Halloween Victoria fue una policía y nosotros sus delincuentes. La pedida de dulces fue fenomenal. Estaba encantada. Iba ella a tocar las puertas y decía "tricotrí". Un día después le hice la famosa broma de "Me comí todos tus dulces" y se enojó. Por un momento pensé que no iba a saber de qué hablaba pero me sorprende lo rápida que es.

Para el día de acción de gracias la pasamos en Sacramento con mi hermana de nuevo. Aprovechamos y festejamos su cumpleaños también. Este año fuimos a Sacramento Winter Wonderland. Debo admitir que fue un poco decepcionante. No estoy segura por qué pero me lo imaginaba mucho más grande y con más juegos. Básicamente lo vi como una mini feria con una entrada iluminada. También miré videos de que había desfiles y shows. Estuvimos ahí por 90 minutos y no hubo nada ni miramos nada. Si sería porque fuimos tarde, o porque fuimos en los primeros días, quien sabe. Sin embargo a mis papás les gustó, a mi hermana y Jacob también, y a Victoria ni se diga.

Otro evento importante que pasó este otoño es el haber conocido a una de mis escritoras favoritas. Reyna Grande. Cuando supe que estaría en Sacramento me emocioné. Y al parecer vive en Davis. Poder platicar un poco con ella y escuchar su historia fue fenomenal. Estoy esperando la continuación de su libro. Debo mencionar que yo la conocí a ella gracias a mi papá, quien escuchó sobre su libro en un programa de la radio. Si eres inmigrante o te sientes que no eres ni de aquí ni de allá, o si alguna vez te has sentido lejos de tu familia este libro es para ti. Muy bonita historia, de esos libros que se leen en una sentada. La distancia entre nosotros - Reyna Grande